VICTORIA DE LA DEMOCRACIA EN AMÉRICA LATINA

Expresidente Evo Morales: «El pueblo ha dado una lección de democracia, ha logrado resistir al gobierno de facto, a dos masacres y a la utilización de la pandemia en beneficio político».

Foto: Vocesenlucha. Evo Morales en el Chapare, Bolivia, 2016

A falta de la confirmación de los resultados definitivos del próximo miércoles, el Movimiento Al Socialismo, sacado del gobierno mediante un golpe de Estado hace menos de un año, arrasa en las elecciones celebradas el día de ayer.

En una jornada de enorme participación popular, con gran presencia militar en las calles y fuertes medidas de seguridad sanitaria, se registraron varios incidentes que dificultaron el ejercicio del derecho al voto. Sin embargo, tras una larga espera al haberse eliminado el sistema de conteo rápido de votos, por fin, a la una de la madrugada, el Tribunal Supremo Electoral, volcó los primeros datos del resultado electoral.

Datos del sondeo a boca de urna que dicen que Luis Arce y David Choquehuanca, candidatos del MAS a presidencia y vicepresidencia, obtuvieron el 52,4% frente al 31,6% del derechista Carlos Mesa. Los votos del pueblo derrotan a la dictadura. Se cae la opción de blanqueo reaccionario tras el período «de transición» con el autoproclamado gobierno de facto de Jeanine Áñez, dirigido desde ese norte que lleva décadas en la sombra poniendo y quitando gobiernos en América Latina.

Luis Arce, afirmó: «hemos recuperado la democracia y la esperanza. Vamos a gobernar para todos los bolivianos y a impulsar un proceso de unidad nacional. Vamos a reconducir el Proceso de Cambio aprendiendo y rectificando nuestros errores». Y el expresidente Evo Morales: «El pueblo ha dado una lección de democracia, ha logrado resistir al gobierno de facto, a dos masacres y a la utilización de la pandemia en beneficio político».

De nuevo, victoria histórica de la democracia en Bolivia. Muy atentos a cualquier anomalía antidemocrática que pueda darse en las próximas horas y días. No olvidemos que el golpe fue apoyado localmente por Policía y Fuerzas Armadas, y alentado por grupos paramilitares vinculados al Comité Cívico de Santa Cruz, la oligarquía terrateniente y fundamentalista cruceña.