«El choque es brutal y el resultado desastroso. En 6 meses aumentó la pobreza (más del 55% de pobres) y duplicó la indigencia (de 9 millones a 18 millones), cayó el consumo, y disminuyó abruptamente la producción industrial y la actividad en la construcción»

14 de junio de 2024 | Fuente: Izquierda Diario

“Aprender es aprender a desobedecer”

Eduardo Galeano

Para Milei la justicia social es aberrante y los impuestos un robo. Por supuesto a él no se le ocurrieron estos conceptos que, antes que nada, son realmente estúpidos. A Milei no se le ocurre nada, o mejor dicho, solo se le ocurren medidas que destruyen la sociedad y entregan lo que queda del país a los poderes económicos que, por ahora, lo sostienen.

Y no se le ocurre nada porque ya ha demostrado más que suficientemente, no tener ideas propias. O para ser más claro, no tener idea alguna. Es simplemente un repetidor de postulados liberales, sacados de google o de alguna contratapa de los libros que cita.

Él se siente algo así como un emperador designado por dios, a través de Conan, para advertir al mundo del peligro socialista. Un Quijote al revés que en lugar de Sancho lo acompaña su hermana Karina, para guiarlo por el camino de los elegidos.

Un idiota cruel, con una fidelidad mimosa a sus amos : el gran empresariado que lo fabricó y lo puso en la raya y sobre todo, a EEUU para quien realmente hace el trabajo sucio.

El hecho de aplicar los fundamentos liberales en Argentina, tal cual aparecen en la teoría, sin tener en cuenta la realidad, ha generado un auténtico zafarrancho económico y social. Miseria y hambre para las clases populares y datos de catástrofe en la macro economía. Todo mal, salvo en los relatos oficiales. Sobre todo en el sanateo cínico y prepotente del vocero Adorni. Y en el denigrante periodismo cómplice de este gobierno miserable.

La berretada anarco-liberal

Como los buenos ignorantes, Milei hace con el liberalismo económico lo contrario de lo que debiera.

Él recoge un par de ideas liberales, surgidas en otros países, en otro contexto socio-cultural, en otra situación política y económica internacional, leídas apresuradamente, sin entenderlas del todo, y las encaja sin más en Argentina, país capitalista dependiente con su propia cultura política y su historia económica.

El choque es brutal y el resultado desastroso. En 6 meses aumentó la pobreza (más del 55% de pobres) y duplicó la indigencia (de 9 millones a 18 millones), cayó el consumo, y disminuyó abruptamente la producción industrial y la actividad en la construcción. Miles de despidos, sueldos de hambre y represión a mansalva cuando los afectados se manifiestan para protestar.

En realidad cuando Espert, un trepador sin escrúpulos de la derecha, dijo que para él Milei no es un liberal, sino otro populista, no estaba demasiado errado. Como era de esperar de un trepador como Espert, ahora se babosea en los elogios a su presidente ¿liberal o populista?, le da igual.

Milei no está solo en su soledad

Cuando juega de local se rodea de aplaudidores incondicionales: Karina, su hermana y protectora de todos los males comunistas que lo rondan y de los envidiosos que lo acechan; Patricia Bullrrich, que siempre encuentra un fiscal Stornelli que ampare sus medidas represivas; Luis Caputo, que de ser “un inútil” según el gran sub-jefe (“el jefe” es Karina, no olvidemos), es ahora “el mejor ministro de Economía de la historia argentina”; Federico Sturzenegger que estuvo, estaba y está ahora como ministro para barrer con lo que queda del Estado; Victoria Villarruel la ambiciosa defensora de la dictadura militar y por eso inamovible, a pesar de jugársela por su cuenta y Adorni para contar la realidad que no es, como si lo fuera, con ese gesto de cheto sobrador que dios o Conan le han dado.

Cuando viaja por el mundo, recibiendo premios de la derecha más rancia y despreciable, aunque sean truchos, gastando la plata de todos, que no hay, se viste con un traje invisible de libertador neo-fascista y con las fuerzas del cielo imparte doctrina anarco-liberal. Los anarco-liberales europeos y estadounidenses de toda la vida, se tapan la nariz, esconden la risa que les provoca el personaje y aprovechan su extravagancia populachera para ganar un poco más de publicidad, que nunca viene mal.

Milei vuelve convencido de que merece el premio Nobel de Economía y que –con sus payasadas- les abrió los ojos a los dueños del circo. Los aplaudidores lo aplauden con entusiasmo y el pueblo sufre las consecuencias.

Luchar contra esta dictadura civil es una necesidad vital

Las clases populares ya están reaccionando a tanto atropello. Desde la dictadura cívico-militar no hubo nada peor. Por ahora las protestas son puntuales, pero la experiencia de lucha del pueblo argentino sabrá cuándo será el momento de decir basta, definitivamente. Y cómo librarse de esta dictadura civil.

Ángel Cappa es exfutbolista argentino, entrenador, licenciado en Filosofía y Psicopedagogía, escritor y autor con Marcos Roitman del libro "Fútbol y política. Conversaciones desde la izquierda" (ed. Akal)