El 1 de agosto de 2017 el Estado argentino vuelve a practicar la desaparición forzada. Un operativo encabezado por Gendarmería Nacional entra en la estancia Leleque. No utilizan palabras, van vestidos para la guerra. La comunidad encapuchada opone resistencia. Las piedras no son balas. Las piedras no se compran en el negocio de la guerra, se toman del suelo cuando la cosa se pone fea. La cosa se puso fea, Santiago Maldonado desaparece.

En 2015 la comunidad mapuche perteneciente al Movimiento Mapuche Autónomo del Puelmapu instaló en la provincia de  Chubut, en Santa Rosa, en el interior de la estancia Leleque, el Lof en Resistencia Cushamen. Defienden tierras ancestrales que hoy están tituladas bajo el nombre de la multimillonaria familia Benetton, propietaria de más de 900.000 hectáreas del sur. Cuando Macri gana las elecciones a la presidencia del país lo celebran, ven más cerca el fin de la Ley 26.160 que impide los desalojos de comunidades indígenas.

En 2016, el lonko Facundo Jones Huala, dirigente indígena, se instala en la comunidad para apoyar la causa. Lo detienen el 28 de junio de 2017. Bajo el marco de esa detención y para pedir su liberación el 31 de julio se realiza un corte de ruta frente al Juzgado Federal de Bariloche. En la madrugada el Pu Lof de Cushamen es allanado por la Gendarmería Nacional.

Desde entonces se reclama la aparición con vida de Santiago. ¿Dónde está Santiago Maldonado? Se han preguntado durante 79 días millones de  voces del mundo. Las noticias informan que se ha encontrado un cuerpo en el río Chubut. Horas después se confirma: es Santiago.

Hoy, más que nunca uniremos nuestras voces para reclamar justicia por la muerte de Santiago. Justicia y Verdad.  Porque Santiago estaba donde la vida quiere expresarse y donde otros, simplemente, no dejan hacerlo. Desde hace siglos las comunidades indígenas están siendo vapuleadas. Primero los invasores, después estados corruptos y ahora las grandes fortunas que gobiernan el mundo porque pueden comprarlo. ¡Basta ya! Nos empobrecen y nos llamamos pobres.

El compañero es compañero, comparte risas y llantos, comparte ideas y actos. Santiago es compañero, compañero sensible al reclamo de un pueblo: ¿se puede ser mapuche sin tierra? La identidad mapuche está vinculada a la mapu, al territorio, a su ngen, a su newen. Recordamos algunos lugares, algunos Lof en resistencia, nosotros también estuvimos allí. Hoy las voces que buscan justicia en el mundo, igualdad en el mundo, somos Santiago.